Georgina Vendrell - FW2011
Viernes, 4 Febrero, 2011
En unas horas se cerrarán las puertas de la X edición de la Valencia Fashion Week, tras una jornada donde el hombre ha cobrado un mayor protagonismo. Hoy se han visto muchas propuestas para él, algunas más comerciales y otras mucho más artísticas que perseguían demostrar una visión de la moda muy particular, de la mano de los diseñadores noveles que integraron la Zona D.
Debería, posiblemente, recapitular brevemente todo lo que se ha visto hoy para ser justo, pero el caso es que para mi, hay un claro favorito para el próximo Otoño – Invierno 2011 así que empezaré mi ristra de posts sobre esta jornada con su presentación, y en los próximos días haré un resumen de la jornada y mostraré también algunos de los looks más sugerentes que he visto entre los asistentes.
Georgina Vendrell personifica muy bien el papel de una diseñadora boutique en un mercado masificado cuyos integrantes, suelen ser peces muy grandes y feroces. Y es que no es nada fácil salir adelante con una pequeña empresa en la una guerra de precios cuando uno es diseñador, gestor y comercial y, sin duda, debe imperar siempre la templanza, la cabeza al fin y al cabo. Y eso es, precisamente, lo que su colección ha demostrado ante la atenta mirada de prensa, compradores e invitados.
Con una vibrante selección musical, Muse siempre es una buena elección, Vendrell ha lanzado a los asistentes un soplo de aire fresco con sus coloridas prendas tras días de riguroso negro. El hombre de Georgina tiene un aire londinense, donde ella asegura que encuentra un hombre distinto y seguro, algo que personalmente suscribo. Sus propuestas, por lo tanto, nos llevan de caza, con sus tonos pardos y mostazas que se mezclan perfectamente, en una paleta de colores muy inglesa, convendréis. Hemos visto abrigos de lana de diferentes tipo, un confortable punto de lana en formatos muy diversos como abrigos-chaleco, cuadros escoceses u otros estampados muy apagados, que los hacen muy llevables y pantalones que potencian la silueta con un patrón que ya os comenté parece pisar fuerte.
Y es que la riqueza de prendas casuales y alegres, que se alternaban con sugerentes reinvenciones de cortes más ochenta o patrones más sobrios, junto con exquisita atención al detalle que se veía en la selección de complementos, han hecho de esta colección sumamente llevable y comercialmente muy interesante, algo que nuevamente confirma que su capacidad creativa no está reñida con su mentalidad empresarial. Y como a los grandes, Georgina ha sido recibida con una clamorosa ovación de un público crítico pero muy agradecido que seguro, seguirá a Vendrell con interés, después de su excepcional propuesta que espero le abra nuevas puertas.
¿Qué os parece su colección?