Valencia Fashion Week

Es insultantemente guapa. Con el pelo suelto y la cara sin una gota de maquillaje, Elsa Pataky se muestra feliz en un encuentro privado con la prensa de mensuales. La proximidad del estreno de su última película DIDI HOLLYWOOD, rodada a las órdenes de Bigas Luna, le obliga a tener sus primeros encuentros promocionales. Hasta su presentación oficial en octubre, le quedan unos cuantos meses de entrevistas, posados y –posiblemente- de cierta monotonía ante la sucesión de inevitables y previsibles preguntas. Pero ella, con la sonriente dulzura a la que nos tiene acostumbrados desde sus comienzos, se enfrenta incansable a la insistencia sobre las “supuestas similitudes” entre Diana (DiDi), su personaje, y ella misma.

Diana es una chica normal, ni siquiera mileurista, que trabaja como camarera en un local de “mala muerte”. Sueña con dejar atrás esa vida, que no le depara más que frustraciones y ningún atisbo de sensación de mejoría. Un día, harta de todo ese submundo, se arma de valor y le lanza a la aventura de cruzar el charco. Miami es su primera parada. Después de dar unos cuantos bandazos y soportar alguna que otra humillación, vuela a Los Angeles. Hollywood es su meta y el azar le ayuda a conseguir su sueño.

Lo que asemeja a Elsa con DiDi es, solamente, que ambas consiguen su sueño americano. No les unen, sin embargo, los peldaños, renuncias y situaciones que cada una tuvieron que subir en el camino a la fama en ese Hollywood, que les deslumbró desde niñas. Eso sí, no faltará quien vea en esta historia algunos trazos autobiográficos. Por mucho que ella se empeñe en desmentirlo, porque no hay nada en su realidad que haya inspirado el guión, será más efectivo pensar que es el homenaje que Bigas Luna hace a la carrera ascendente y triunfa de la actriz.

La llamada del director era “una asignatura pendiente”. El primer acercamiento se había producido años atrás. Elsa tuvo que renunciar a trabajar a sus órdenes porque compromisos previos se lo impidieron. Estaba escrito que sus caminos volverían a encontrarse. El resultado de ese trabajo conjunto se verá el próximo mes de octubre.

Bigas Luna recreó el mundo de Hollywood, que él conoce e imagina a partes iguales, rodeando a Pataky de un elenco de actores muy “ad hoc”. El veterano Peter Coyote interpreta a un representante/publicista/manager al más puro estilo americano. Un creador de estrellas, en defintiva. El top model inglés Paul Sculfor es la pareja sentimental de DiDi, el hombre con el que forma un “tándem” de éxito.Son los triunfadores, a los que todo el mundo admira y a quienes todos quieren siempre en sus fiestas. Son sin duda, el foco de atención mediático de la meca del cine.

DiDi HOLLYWOOD es la primera incursión seria y protagonista del modelo Sculfor en el cine americano, donde es más conocido por sus conquistas sentimentales (Jennifer Aniston, Cameron Díaz) que por sus trabajos en la gran pantalla.Es guapo al más puro estilo gentleman inglés. Esta irrupción en el cine le ha despertado “un gusanillo” del que ya no quiere desprenderse y que aspira a poder potenciar en un futuro con nuevas oportunidades. Reconoce que el físico le ha ayudado a que le prestaran atención en los castings hollywoodienses a los que se ha presentado, pero confía que el talento se imponga y se convierta en su mejor arma de seducción.

De momento, tanto a Elsa como al resto del reparto, les espera el dictamen del público por este nuevo trabajo. Ellos ya han dado el “pistoletazo de salida” en la promoción y se emplearán a fondo, en los próximos meses, para convencer a crítica y público de que han acertado en su apuesta. Mientras tanto, la actriz española no deja de recibir ofertas muy tentadoras. La última llamada de Woody Allen le ha hecho una mujer más feliz ¡¡si cabe!!. La oferta para trabajar con el cineasta neoyorkino está ahí, pero aún falta la rúbrica que selle el acuerdo. Si no llegase a buen puerto, ya es una recompensa que el archiconocido director haya puesto sus ojos en ella. Eso ya nadie se lo quita…

Os reconozco mi debilidad por los musicales, por el teatro, por las representaciones en vivo y en directo. Desde hace años, ya siendo una adolescente, aprovechaba cualquier viaje a Londres o Nueva York para empaparme de todas las novedades y estrenos en el West End londinense o el Broadway de la Gran Manzana.

Con el tiempo, Madrid se fué abriendo a este tipo de ofertas de ocio. Todavía recuerdo con qué alegría celebraba, en mis tiempos de universitaria, cada noticia que se publicaba, anunciando que se avecinaba la llegada de un estreno de nivel. Me las ingeniaba para poder escaparme a ver todas esas novedades, que aún hoy tengo muy presentes.

Hoy sigo yendo a ver todos los estrenos que puedo, sea donde sea que se produzca. Este último fin de año lo pasé en Nueva York. He viajado a esa ciudad en varias ocasiones, pero nunca había recibido allí un Año Nuevo. Broadway ofrecía una oferta de espectáculos difícil de equiparar por otra ciudad del mundo, salvo por la oferta londinense. Por “los pelos” me perdí ver a Jude Law como HAMLET y a Hugh Jackman y el “Bond” Daniel Craig en STEADY RAIN, pero en compensación ví en teatro a Catherine Zeta Jones y Angela Landsbury…y “tripití” el musical BILLY ELLIOT. No me canso de verlo, como tampoco el clásico LOS MISERABLES.

Esta obra, que se estrenó el 8 de octubre de 1985 en el Teatro Barbican de Londres, es todo un clásico en el mundo de los musicales. El 12 de marzo de 1987 se estrenó también en Broadway y, desde ambas fechas, el musical sigue en auge en las dos ciudades. Desde la primera función, a día de hoy, el musical ha sido visto por más de 56 millones de espectadores en todo el mundo, representándose en 21 idiomas distintos. Su historia ha llegado al corazón el público como muy pocos espectáculos han conseguido hacer.

Este año se cumples las “bodas de plata” de este musical. Y, por tal motivo, regresa a los escenarios de Madrid, a ese teatro Lope de Vega que se ha convertido en referente obligado para los grandes estrenos internacionales. La obra homónima de Victor Hugo, escrita hace más de 130 años, es la historia de la lucha por la libertad, el coraje y la paz de un pueblo.LOS MISERABLES es, ante todo, una historia de redención, la de un hombre que huye de la implacable ley, no de la justicia, en la Francia post revolucionaria y cuyo destino, a lo largo de los años, le llevará a encontrarse con el amor y el coraje de unos pocos…y la miseria de muchos. Una historia llena de pasión que ha convertido a este musical en el más longevo de todos los tiempos y que se ha ganado, por méritos propios, la recompensa de ser uno de las grandes representaciones de nuestro tiempo. El 18 de noviembre es la fecha de su regreso a la Gran Vía madrileña.

También regresa a Madrid STOMP, un espectáculo que –en su momento- rompió moldes. No pude verlo cuando estuvieron en España. Intenté enmendar “mi fallo” en Nueva York, pero estaba todo vendido en esas fechas. Tal vez éso acrecentó, aún más, mis ganas por conocer el encanto de estos magos del rítmo, que combinan de manera única la percusión, el humor y el movimiento, elevando a la categoría de instrumento musical los utensilios cotidianos.

Con un espectáculo más fresco, rápido, estimulante y divertido, una de las cinco compañías que STOMP tiene en gira internacional simultánea, llegará al teatro Coliseum de Madrid para actuar dentro del Festival de Veranos de la Villa. Tal vez, después de verlos del 10 al 22 de agosto, acabarán convenciéndome que el cubo de basura tiene más arte que un vestido de alta costura…

Fotos LOS MISERABLES : Michael Le Poer Trench y Catherine Ashmore (The Company)

Imposible no acordarse del aniversario de su muerte. Desde primera hora de la mañana, las cadenas de televisión y programas de radio rememoran la noticia que, hace un año, convulsió no sólo al mundo de la música, sino a un planeta entero que, en una u otra forma, le admiraba. La desaparición de Michael Jackson fué una verdadera revolución mediática.

Como suele ocurrirle a la mayoría de los genios (y él, indiscutiblemente, lo era) tenía sus manías, sus excentricidades, sus vacíos, sus inseguridades. De manera muy injusta (por lo menos, desde mi punto de vista) fué juzgado con dureza por la opinión pública, que vió en él al autor de una serie de episodios privados que, con el tiempo, se vieron anulados por unas sentencias que, tal vez, llegaron tarde y que, mientras no se dictaron, le echaron encima una presión mediática y popular difícil de soportar.

Nunca llegué a entrevistarle, pero sí le vi actar en directo. Estuve con él en dos ocasiones. Las dos en Disneyland París. La primera fue hace catorce años. Acabada de divorciarse de Lise Marie Presley (enero 1996) y, mientras en todos los medios se especulaba con las razones de esa separación, el cantante estaba acompañado en ese viaje por el hijo de su ex mujer, nacido en un anterior matrimonio. El hotel, en el que se alojaba, estaba totalmente tomado por unas legiones de fans que dormían a las puertas del parque, en sacos preparados para la ocasión. Cada día, a las seis de la tarde, acudían al lobby del hotel donde Jackson aparecía para saludarles y agradecer su cariño incondicional.

Era una época en la que circulaba la leyenda que aseguraba que siempre viajaba con su cámara de oxígeno, su burbuja de ozono y mil cosas más. Como imaginareis, me faltó el tiempo para preguntar a los directivos del parque por tal originalidad. Desde el principio me desmintieron tal leyenda. Y no dudé de su testimonio dada la relación personal y profesional que me unía a la gente de Disney. Jackson, por seguridad, se alojaba en la zona más vigilada del hotel.La suite “La Bella Durmiente” era la que siempre destinaban al artista, porque en ella se podía alojar con los invitados que le acompañaban y tener sus reuniones de trabajo, ya que en ella existía una sala de reuniones al uso. Lo que sí os digo es que el nombrecito de la suite siempre fue motivo de muchas bromas, algo que al mismo Michael le arrancaba una sonrísa.

La otra vez que estuve con él fue en una cena, también en Disney, con motivo de la inauguración de una atracción. Fue una cena bastante restringida y en ella sí pudimos intercambiar algunas impresiones. Tengo que reconocer, ante todo, que Jackson me inspiró mucha ternura. No me pregunteis por qué, pero su voz a medio hacer, sus gestos comedidos, su enfermiza timidez fuera del escenario, me creó un instinto de protección que aún hoy conservo. No llevaba su tan cuestionada mascarilla. Me dí cuenta que sólo se la ponía llegado el momento de salir a la calle. Y, tal vez, su real motivo no era el hipotético contagio que todo el mundo alegaba, sino que las aletas de su nariz no habían asimilado bien el cambio de color de piel y seguía teniendolas de su color de nacimiento.

Estos dos contactos con él “tiraron por tierra” muchas de las cosas que se habían dicho de él. Recuerdo que, cuando vino a España para cantar en el Vicente Calderón de Madrid, tuvo encuentros promocionales en los se aseguró, en su momento, que nadie pudo acercarse a él, ni tocarle, ni hablarle porque había órdenes tácitas de que así fuera porque decían que Jackson nunca trataba con nadie. Nada más lejos de la realidad. Yo, no sólo hablé con él, sino que me fotografié…con su mano en mi hombro!!!

Hoy, un año después de su desaparición, se sigue echando en falta el magisterio de su talento. El “rey del pop” ha muerto y su legado ya forma parte de la historia de la música, pero los escenarios del mundo se quedaron huérfanos aquella madrugada de junio…

Hay veces, y no sabemos realmente por qué motivo, una reunión de amigos se convierte –con el tiempo- en una tradición que no puedes dejar de cumplir. Por experiencia propia, cada año en dos o tres fechas muy concretas, no puedo dejar de celebrar cenas caseras con mis amigos, porque se han convertido en algo obligado.

Algo parecido es lo que le ocurre, desde hace unos años, a Isabel Gemio quien, en la noche de San Juan, reúne en su casa –alrededor de la hoguera- a sus allegados. La diversidad de los amigos convocados es la mejor garantía de éxito de esa cita anual, que todos le reclaman y nadie quiere perderse.

Anoche volvimos a responder a su llamada. Vestida de blanco y más favorecida que nunca, Isabel recibió a todos sus invitados en el jardín de su casa, decorado en blanco, con mesas redondas vestidas de color azahar. Un camino de velas te dirigía hasta la mismísima anfitriona que, acostumbrada a estas celebraciones, en ningún momento mostró nerviosismo ni inquietud, sabedora de que todo estaba controlado y que sus invitados habían confirmado todos. No faltó ni siquiera Pepe Navarro, en un día delicado para el comunicador, demostrando que la amistad está por encima de cualquier otra contingencia.

El periodista acudió acompañado de su mujer. Sabía que jugaba en casa por lo que, en ningún momento, se mostró esquivo ni poco comunicativo con nadie. Le ví todo lo relajado que se puede estar cuando, esa misma mañana, media España le tuvo como foco de información por la demanda de paternidad presentada contra él.

“Estoy bien, llevando esto como puedo” –me comentó cuando nos encontramos y le pregunté por su estado de ánimo-. Nos conocemos desde hace unos cuantos años, cuando trabajamos juntos en Antena 3 radio. “Somos la vieja guardia”, me dijo entre risas, “y es un privilegio poder contarlo” .Esa complicidad es la que propició una conversación sincera, íntima y esclarecedora sobre lo que está ocurriendo en su vida pero, me vais a permitir, que lo que hablamos se quede “bajo secreto de sumario”. Sí puedo deciros que un cierto desencanto preside su ánimo. Sabe que “es el malo de la película” porque no ha hablado en los programas de televisión, ni se ha presentado a las pruebas de paternidad, solicitadas por el juez. Tal vez por éso, también sabe que –aunque tiene la razón y desmontó uno por uno los argumentos de la parte contraria- va a perder esta batalla. Aún así, reconoce tener la conciencia muy tranquila y haber obrado de manera consecuente en este tema.

Treinta y cinco demandas tiene interpuestas en los tribunales por todas las informaciones infundadas y los comentarios malintencionados, vertidos desde que comenzó este doloroso episodio de su vida. No confía mucho ni en la rapidez de las resoluciones ni en que salgan delante de manera positiva, pero considera que donde debe defenderse y exigir sus derechos privados es en los tribunales y no en los platós de televisión.

En el momento de saltar la hoguera estoy segura que, en su papel de cosas negativas del último año, habrá quemado todo lo ocurrido en los últimos meses. En el de los tres deseos para este 2010, no hay que dejar volar mucho la imaginación para intuir lo que le pide a la vida en estos momentos.

Conoce, como pocos, el sabor del rechazo social, por éso ahora saborea lentamente el reconocimiento unánime de su talento. Y lo hace con la misma humildad con la que se inició en la profesión. Tiene una “vis cómica”,que algunos no han descubierto, y una “retranca gallega” que ennoblece su origen. Es tolerante, conciliador, honesto, solidario…Salió “del armario” porque necesitaba sentirse “una persona de primera”,pero ya le cansa que siempre le pregunten “por lo mismo”.Desde hace tiempo se ha convertido en el presentador todoterreno. La audiencia le responde y, cada proyecto, le sirve para crecer profesionalmente..Siempre le digo que quedan pocos como él y, que si no existiera, habría que inventarlo..

Nos conocemos desde hace tanto tiempo que “escuece” recordarlo, porque nos damos cuenta que tenemos unos cuantos años encima. Años que nos han dado experiencias, vivencias, algunas arrugas que intentamos retrasar usando buenas cremas y también, por qué no decirlo, algunos momentos duros en los que nuestros respectivos hombros fueron unos buenos aliados. La verdad es que tengo que reconocer que Jesús te cautiva al conocerle. Nos unen, además, muchas risas compartidas en unos cuantos viajes y una buena dosis de confidencias en esos momentos críticos . Como el Ave Fénix, Jesús resurgió de sus cenizas cuando saboreó las hieles de la vida, se quedó sin trabajo y tuvo que alimentar de nuevo su autoestima para salir adelante.

La vanidad es algo que no entra en su diccionario. Sigue siendo el mismo chico que, hace más de dos décadas, dejó su Ferrol natal para cumplir un sueño que, a día de hoy, ha cumplido con creces. Se siente afortunado porque la vida le ha dado más de lo que nunca se atrevió a imaginar, tal vez por eso ahora concentra todas sus energías en los tres pilares de esa vida: su marido Roberto (que le llegó en el momento oportuno y le ha aportado órden, equilibrio y mucho amor), su trabajo y sus niños de la ONG que concentra, desde hace tiempo, todas sus fuerzas. El título de Embajador Especial para los refugiados de ACNUR, que recibió en Nueva York hace dos años, es el galardón que lleva más a gala.

Por “sus niños”, como él les llama, se ha desplazado a los más remotos rincones del planeta para conocer sus necesidades. Darles cobijo, educación, salud y una mejor calidad de vida se ha convertido en su prioridad. Todo vale con tal de conseguir su bienestar. Tal vez por eso, a sabiendas de lo difícil que es conseguir fondos para construir hospitales y escuelas, Jesús ha aceptado un nuevo reto del que se habla, en todos los rincones informativos, desde hace unos días. A cambio de una cantidad de dinero que cubra la construcción de una escuela, el gallego ha decidido desnudarse en la revista Interviú. Conociéndole será un posado elegante, sugerente, meditado. Lo importante no es desnudar su cuerpo, sino dejar al aire su alma. Y, en ella, Jesús tiene su mejor arma de seducción. Ahí radica el verdadero valor de su destape, el valor de los sentimientos, el valor de la solidaridad. ..

Vaya por delante que no conozco a Sara. Bueno, no la conozco personalmente, quiero decir. Tengo de ella la imagen que proyecta en sus apariciones televisivas y también, por qué no decirlo, de lo que me cuentan sus compañeros de cadena. Como suele ocurrir, ”nunca llueve a gusto de todos”. Unos hablan maravillas de ella y otros, como es de suponer, censuran sus aires, al parecer, de estrella.

No entro en cómo trata a los demás o si tiene un punto de soberbia en su personalidad, ni siquiera cuestiono su belleza, algo obvio y fuera de todo comentario. No lo hago porque procuro no hablar, en el aspecto humano, de la gente a la que no conozco de manera directa. Las referencias suelen ser maliciosas y condicionan la imágen que uno se puede crear. Procuro no hacer a los demás lo que no me gustaría que me hicieran a mí, así que mi valoración de Sara se suscribe al ámbito estrictamente profesional.

Como reportera me parece correcta, lo que no quiere decir que no sepa hacer el trabajo que le encomiendan. Como futbolera que soy, creo que sus entrevistas son aceptables y sus crónicas, a pié de banda, responden a lo que se le pide en cada momento. Dicho ésto, no me es ajeno el atractivo de su físico y el poder que ejerce sobre los demás. A algunos les puede parecer machista la apreciación, pero no hay que dar la espalda a una realidad.

Sara lleva una semana siendo noticia muy a su pesar. Su relación sentimental con Iker Casillas le está costando más que un quebradero de cabeza. Su “pecado” ha sido enamorarse del portero del Real Madrid y, en este Mundial, de la selección española. A ambos les miran con lupa desde que se han enamorado. Si Iker tiene una “cantada bajo los palos”, todos los ojos se vuelven hacia la periodista, a la que han llegado incluso a acusar de “desestabilizadora de la roja”. Mal vamos con comentarios como éste!!!

Sara es periodista de deportes y, por circunstancias de la vida, conoció a su pareja en un evento deportivo. Entraba en las probabilidades del destino. Como también formaba parte del azar el hecho de que coincidiese con su pareja en el desarrollo de su profesión y, por supuesto, llegase a entrevistarle…como ocurrió la pasada semana, tras perder España su primer partido del Mundial contra Suiza. Le censuraron la obviedad y poco interés de sus preguntas. A nadie se le escapa que no era un momento fácil para ninguno de los dos. Sabían que eran el centro de atención de medio mundo. Iker ni la mira, Sara intenta mantener la compostura. La despedida es fría, casi distante. Un “hasta luego” que sorprendió a los que esperaban una muestra más efusiva entre la pareja. No me habría resultado extraño dos besos en las mejillas. Es más, me habría parecido más natural.

Creo que es excesiva, injusta y machista la campaña contra Sara. Ni ella, por sí sola, tiene el poder para desestabilizar a toda una selección, ni los fallos de Iker llevan al equipo a perder. Si España gana el Mundial, ¿también se lo debemos a Sara porque ha centrado a Iker o, entonces, diremos que tenemos una selección que “es la bomba”?..Quizá todos deberíamos dedicarnos a vivir y dejar vivir .No es fácil, porque tenemos un espíritu voyeur y pelín cotilla, que nos lleva a cuestionar la vida de los demás cuando no tenemos la nuestra resuelta. Nos haríamos un favor todos…

Hace catorce años conocí, exahustívamente, la labor generosa, humanitaria y de profundo amor de Vicente Ferrer en India. A él le conocí en Madrid,cuatro años más tarde,cuando visito nuestro país para buscar apadrinamientos.No sé por qué pero, desde niña, he sentido una atracción especial por ese país, por su cultura, por sus gentes. Más de una vez, en mi adolescencia y también hace unos pocos meses, valoré la firme posibilidad de irme a vivir allí para ayudar a escolarizar a los más necesitados.

He tenido siempre un gran instinto maternal pero, por circunstancias de la vida, nunca he podido ser madre y, ahora, ya se me antoja demasiado tarde para ver cumplido uno de los sueños de mi vida. No me siento frustrada pero, tal vez, sí un poco incompleta. Me consuelo pensando que hay miles de niños en el mundo que necesitan ser adoptados, que buscan una mejor calidad de vida..Y a ésa esperanza me agarro en los momentos en los que añoro no haber vivido la experiencia de la maternidad.

Dice que “a quien Dios no le da hijos, le da sobrinos”. Y yo tengo la fortuna de tener cuatro maravillosos, que me han ayudado a sobrellevar ese instinto maternal del que os hablaba, compartiendo con ellos experiencias vitales que me han enriquecido como persona. Sé que no es lo mismo, pero es el consuelo al que nos agarramos las mujeres que, como yo, no conocen la sensación de dar la vida a otro ser.

Tal vez, esa carencia afectiva como madre, es la que me ha llevado siempre a sensibilizarme de una manera especial con los que apenas tienen nada, o no conocen otra cosa que la miseria. Aún así sonríen, son felices y desprenden un amor que otros, con una vida mucho mas fácil, te regatean.

Al conocer la labor de Vicente Ferrer y la lucha tan extraordinaria que, desde hace cuarenta años, llevaba en Anantapur , la zona más mísera de India, no dudé ni un segundo en implicarme. Ser periodista no es un activo para poder ir a trabajar en la Fundación. Lo que necesitan son maestros, médicos, logopedas, arquitectos. Esas profesiones con las que les ayudan a construir un mundo nuevo allí. Así que, tras saber que tenía pocas posibilidades de poder ayudar “in situ”, como yo quería, decidí apadrinar. Nunca agradeceré lo suficiente el haber tenido esta opción y vivir la experiencia humana que los apadrinamientos me están regalando.

Tengo tres ahijados: Lalitha, que ya tiene dieciocho años. Ya “vuela sola”, está estudiando cursos superiores y me enorgullece saber que, en parte, es por mi contribución. La apadriné cuando apenas había cumplido los cuatro años y, durante estos catorce de relación, he vivido paso a paso su crecimiento, su evolución en los estudios, su paso de niña a mujer. Es mi niña adolescente o, por lo menos, así lo siento.

Mi segundo ahijado es Anjineyulu. Tiene doce años y, en los ratos libres que le deja la escuela, se dedica a tejer los saris de seda. Me cuenta en sus cartas que ya casi ha aprendido a hacer el 100% de la confección y le gusta tejerlos porque, como en las bodas todas las mujeres tienen que vestir esa prenda, le gusta ver lo elegantes y guapas que están con el sari que el ha confeccionado.

Jayadurga es mi último ahijado. Le apadriné cuando Lalitha cumplió la mayoría de edad y se hizo independiente. Me cuentan sus educadores que es muy estudioso y que, en estos momentos, está aprendiendo a leer y escribir en su idioma natal. Le encanta hacer footing y comer caramelos con galletas. Cuando consigue que le den uno ¡¡es toda una fiesta!!. Algo que para nosotros es habitual y que apenas le damos importancia, para ellos es motivo de celebración. Sus padres trabajan en el campo, cultivando la cosecha de plátano.

Los tres, que se sientan útiles, que estudien, que coman todos los días, es el resultado de años de lucha de Vicente Ferrer. El consiguió que los llamados “intocables” (los desechos de la sociedad, los que no tenían derecho ni a comer, los que no podían trabajar porque ni a eso tenían opción) sean hoy gente integrada en su sociedad. Todavía queda mucho por hacer, muchos privilegios que conseguir, muchas batallas que ganar, pero lo más difícil se ha conseguido.

Ayer se cumplió el primer aniversario de su muerte y en octubre se entrega el Nóbel de la Paz. Nunca se lo dieron a Gandhi, que lo mereció como hombre conciliador, predicador de la no violencia y pacificador que fué, y sí a Obama el pasado año, supongo que para estimularle en la lucha por un mundo mejor. No me cabe la menor duda que Vicente Ferrer concilia, en su tarea, todas las virtudes que se le exige al merecedor de este galardón. El millón de dólares que le avala sería el mejor regalo para la memoria de este hombre que, en su mujer Ana y su hijo Moncho, tiene la seguridad de llevar su legado a buen término. Ese dinero ayudaría a la construcción de más hospitales, viviendas, escuelas..Sería el mejor tributo, la mayor recompensa, para un hombre que encontró, en la erradicación de la miseria y en la lucha por los derechos de la mujer, el camino directo a la santidad, una santidad laica que, los que le admiramos, confiamos que le sea reconocida pronto…

Siempre se ha dicho que, tras la tempestad, llega la calma. Y así lo estoy sintiendo. Después de unos días succionada por “el fenómeno Cruise”, ahora retomo mi rutina cotidiana, mi vida familiar y el disfrute de los amigos. No hay nada que me guste, llene y serene más que una buena conversación. Y, si es con alguien querido, la sensación no puede ser más placentera.

Eso es lo que sentí días atrás almorzando, en Sevilla, con Patricia Rato. Somos amigas desde que era novia de Espartaco. Mi amistad con el torero propició que la conociera forjándose una complicidad que, con el tiempo, se convirtió en una profunda amistad, algo que ni su separación matrimonial ha podido quebrar.

Nos debíamos este encuentro desde hace tiempo. Habíamos hablado por teléfono últimamente, pero faltaba esa conversación que nos ayudara a “ponernos al día”. Estaba al tanto de la debilidad de su estado de ánimo, del dolor que llevaba por dentro, tal vez por ello quería encontrar el momento oportuno en el que su fortaleza le ayudase a hablar sin derrumbarse.

Me encontré a una mujer curtida por el dolor, sin perder una dulzura que siempre admiré en ella, templada de ánimo y con la misma belleza interior, que cautivó –hace más de veinte años- al que ha sido su marido hasta hace unos meses.

Aún sigue haciéndose muchas preguntas y, en momentos de debilidad, se recrimina muchas cosas y se “castiga” un poco pensando que, tal vez, de haberlas hecho de otra forma no habrían desencadenado este final.

No es el momento de pensar sobre “ lo que pudo haber sido y no fue”. Ni de arrepentirse por haber actuado siempre de buena fé, asumiendo –cada dia - un segundo plano “porque Juan era el importante, el que se jugaba la vida, el que se había ganado el protagonismo” . Patricia siempre caminó dos pasos detrás de Espartaco, algo que le pidió el torero en una ocasión, cuando aún eran novios. Y ella lo aceptó de buen grado porque “estaba ciegamente enamorada y quería hacer todo lo que él me pedía”. Y así lo hizo durante los 22 años que han estado juntos.

Ha sido un matrimonio modelo, con sus subidas y bajadas ¡¡como todo el mundo!!, pero con una estabilidad afectiva que nada hacía presagiar este final. Nunca concedieron exclusivas remuneradas e hicieron pocas concesiones a su vida privada de cara a la galería. Sin embargo, ahora viven “en el escaparate”. Patricia intenta normalizar su vida, pero no es fácil con fotógrafos en la puerta de casa y siendo el centro de atención en las tertulias televisivas. No hay día en el que los rumores no la pongan en el disparadero. El último apuntaba a una posible relación sentimental con Francisco Rivera, amigo de la familia desde niño por la estrecha relación que siempre existió entre Paquirri y Espartaco. Francisco se vió obligado a frenar las especulaciones, enviando un burofax a los medios de comunicación y defender, de esta forma, la dignidad e imagen de Patricia.

A día de hoy, el matrimonio está roto. Tras firmar la pareja, hace unos meses, un convenio regulador para defender los derechos de sus hijos (que el torero no quiso ratificar posteriormente), Patricia ha tomado la decisión, el pasado día 9 de junio, de presentar la petición de divorcio. En un intento por defender la negativa de Espartaco, al no querer refrendar el convenio, su entorno proclama que el torero nunca quiso separarse de su mujer y que, por ello, no ratificó su firma. Lo fácil para él habría sido volver a casa y seguir con la vida que nunca debió abandonar, pero “sus aventuras fuera del hogar” propiciaron la actual situación.

El tiempo pondrá las cosas en su sitio y acomodará los sentimientos. Patricia ya piensa en trabajar y “pasar página” a la vida que llevó con el auténtico amor de su vida. Aunque hay momentos en los que se lamenta de su mala suerte, mirar a sus tres hijos le disipa cualquier mal pensamiento. Hay veces que el destino te da segundas oportunidades. Patricia sólo tiene que pensar que, para ella, la vida empieza hoy. A veces, para ser feliz, hay que empezar de nuevo. Hoy tiene que ser el primer día de su nueva vida…

Sevilla tiene un color especial. Eso, al menos, es lo que reza la canción. Y no se equivocó el romancero. Ayer tuvo color, sabor y espectáculo hollywoodiense. El estreno mundial de NOCHE Y DIA bañó la ciudad de glamour, de actividad, de autógrafos, de fans, de gritos de admiración..Una jornada que dió para mucho, incluso para las críticas desmedidas e infundadas. Es muy español censurar a aquellos que, sin pedir nada a cambio, nos convierten en protagonistas. Cruise decidió, por iniciativa propia, celebrar la première mundial de su último trabajo en Sevilla. Su objetivo era devolver el cariño y entrega de una ciudad, que les acogió para rodar en sus calles meses atrás. También criticaron, en ese momento, los trastornos que ocasionaban los cortes de calles y la presencia de los actores en ellas. A cambio, Sevilla ingresó siete millones y medio de euros en “sus arcas” y una promoción mundial, que ayer tuvo su pistoletazo de salida.

Las críticas, vertidas las últimas horas, han levantado algunas ampollas de incomodidad por infundadas. Se han escrito muchas inexactitudes y se han comentado muchos rumores sin fundamento, pero ninguno ha podido con la fuerza, el carisma y la entrega de un Cruise que consiguió darle, anoche, a Sevilla el relumbron de los grandes acontecimientos de la meca del cine.

Trabajar con el actor de Siracusa requiere entrega, meticulosidad, saber estar. No es puntilloso, es profesional. No es maniático, es perfeccionista. No exige nada extraño en los hoteles, como se ha llegado a decir. No pide paredes blancas, ni sabanas de seda, ni silencios a mil metros a la redonda. Es mucho más normal de lo que quieren hacer creer, pero vende más hacerlo parecer un lunático que un tipo con el privilegio de la fama.

El esfuerzo de la distribuidora Fox para que ayer todo rozase la perfección fué titánico. Coordinar 400 periodistas, llegados de todo el mundo, cerca de 50 medios españoles, 500 invitados internacionales y representativos de Sevilla, no fue tarea fácil. Por todo ello, los organizadores no son ajenos a las cifras erróneas que se han barajado, ni a los comentarios maliciosos que apuntaban poco menos que un “boicot de la distribuidora” a la prensa española en la première de anoche.

¿Alguien, de verdad, se cree que algo así podría ocurrir? ¿Alguien puede pensar que se organiza un evento de esta magnitud en una ciudad española y no se invita a la prensa del país y al público sevillano?.Teniendo en cuenta que el ayuntamiento de Sevilla exigió 100 invitaciones para sus compromisos, no creo que fueran para el sultán de Brunei y sí para sus sevillanos incondicionales. Si a esto añadimos los invitados VIPS, que todos pertenecían a la sociedad sevillana, es evidente como queda rebatido el malicioso rumor.

Dicho esto, añado que los 20 cámaras y redactores españoles acreditados para la première, no sólo tuvieron acceso a la “red carpet” y sus celebrities, sino también al propio Tom Cruise, al que entrevistaron en los habituales “soundbites” de la alfombra roja. El actor, conocedor como pocos del poder de la prensa y del valor del marketing, jamás habría aceptado dejar a la prensa española en un segundo plano. Ni él ni la propia Fox, que vive del trabajo y promoción de estos profesionales todo el resto del año.

Polémicas la margen, la noche dió para mucho. La duquesa de Alba conoció al actor, como era su deseo. “Es muy guapo”, me comentó casi susurrando. “No te olvides de pedirle una foto dedicada, pero que me ponga Cayetana en la dedicatoria. Lo de duquesa no me gusta mucho”. Vestida con un entallado vestido de aire hippy y una manoletinas, que cautivaron a Katie Holmes, llegó al teatro Lope de Vega con su amiga Carmen Tello y su admirado Curro Romero. Tras saludar a todo el equipo de la película y charlar un rato, en un aparte con Tom Cruise, la duquesa se dirigió a su localidad para ver como su ex yerno, Francisco Rivera, ejercía de desenfadado, habilidoso y ocurrente maestro de ceremonias. Previamente, el torero había conocido a los protagonistas de la película, que escucharon asombrados detalles sobre su vida profesional y el valor que hay que desarrollar delante del toro.Tom, Cameron Díaz y Katie Holmes atendían, entre atónitos y admirados, cómo Francisco hablaba del amor al toro y, al mismo tiempo, del miedo y las cornadas, que marcan su cuerpo. Reconocieron desconocer el sentido de la fiesta nacional, por lo que el torero les brindo la oportunidad de invitarles a una corrida, donde la tradición, la estética clásica y el arte se fundan como en ninguna otra. Ya hay fecha y lugar.. La suerte está echada….

Tom Cruise ya ha aterrizado en Sevilla. En avión privado, como habitualmente suele desplazarse para sus promociones internacionales, el actor llegó de madrugada a la zona privada del aeropuerto hispalense, acompañado de su familia (Katie Holmes,su hija Suri ).Horas antes lo había hecho Cameron Díaz y el resto del equipo de la película NOCHE Y DIA. A ellos se unía una amplia representación de la distribuidora Fox internacional, así como los miembros habituales del equipo de Cruise, entre los que se encuentra su hermana y representante, auténtica “mano derecha” del actor.

Con su llegada se han movilizado la legión de paparazzis que, desde hace días, están destacados en la ciudad del Guadalquivir. Si a ellos sumamos los casi cuatrocientos periodistas internacionales, llegados desde los más variados países del mundo para cubrir este acontecimiento cinematográfico, Sevilla está “tomada” por la prensa a la “caza y captura” de una buena imagen o una declaración exclusiva que les haga aportar algo diferente a lo que se está diciendo estos días.

El plan de trabajo que espera hoy a Cruise y compañía es maratoniano. Entrevistas, recreación en la Plaza del Triunfo sevillano de una escena de la película, consistente en una frenética persecución, convivencia con los fans durante unas dos horas y, a las 10 de la noche, “el plato fuerte”. La première en el teatro Lope de Vega se presume como un gran acontecimiento. Así se percibe, por lo menos, en el ambiente.

Dicen los sevillanos que pocas veces recuerdan un “run run” como el que hay, desde hace unos días, en el ambiente y en los comentarios de “corrillo vecinales”. Aún tienen frescas, en su memoria, las imágenes de Suri Cruise vestida de flamenca o la revolución que se organizaba cada vez que Katie Holmes decidía irse de shooping.

Me comentaba Vicky Martín Berrocal que, el pasado noviembre, cuando la familia Cruise se instaló en Sevilla durante las semanas de rodaje, la llamaron para anunciarle que Katie Holmes tenía interés en conocer sus diseños. El encuentro nunca se produjo, pero la actriz quedó prendada de algunos vestidos de su última colección. Quién sabe si, en este viaje, se consuma la compra y vemos a la Sra Cruise internacionalizando la moda “Martín Berrocal”.

La propia Vicky me instó a que le comentara a Cameron Díaz su deseo de vestirla para la première vespertina, pero la americana ha llegado a Sevilla con estilista incorporada. Una lástima porque, sin duda alguna, luciría espléndida con algunas propuestas de la diseñadora, que no podrá estar esta noche en el estreno porque un importante viaje, relacionado con la expansión de su moda, le ha impedido acudir a la cita.

Quien sí estará será Francisco Rivera. Y será, junto con los protagonistas de la película, uno de los que más atraerá las miradas de los presentes. Esta vez no será por su poder mediático, ni por el atractivo físico que nadie le discute, ni siquiera por coincidir –una vez más- con la que fue su suegra, la duquesa de Alba. Sino que hoy será especialmente noticia porque vivirá su bautizo como presentador. El torero será el maestro de ceremonias de la gala de esta noche. Cuando le propuse este reto, no lo dudó. “Será un honor”, me dijo. Y, aunque es consciente que le cuestionarán la osadía, acepta de buen grado la aventura porque “es una propuesta que no puedo despreciar”. Me da que la presencia de Cameron Díaz ha tenido mucho que ver en la decisión…